El arte árabe se desplazó por muchos países europeos y por esta razón hoy en día se pueden observar muchos monumentos creados por los antiguos árabes y su arte. Probablemente, este estilo de arte fue muy destacado, en la historia del arte, ya que creaba obras de arte (sobre todo de arquitectura) muy grandiosas.
En la arquitectura se distinguen tres períodos:
El califal (siglos VIII-XI). El modelo de arte califal es la Aljama o mezquita de Córdoba, única entre todas las mezquitas conocidas, que pone los cimientos de una nueva arquitectura islámica. La parte primitiva de Abderramán I tiene once naves, ampliadas por Abderramán II, Alhaquem II, de cuya nave vemos un detalle del techo, Almanzor hasta diecinueve naves. El interior es un bosque de columnas, casi un millar, cada una con una perspectiva diferente y con capiteles variados.
El almoraví y almohade (siglos XI-XIV). Al arte almoraví y almohade, llamado también africano, cuenta con los restos de la Aljafería de Zaragoza; el Palacio de Yeso del Alcázar de Sevilla; la Giralda, minarete de la mezquita de Sevilla, comenzada en 1173 por Abu Yacub, y otras obras notables.
El nazarita o granadino (siglos XIV y XV). La obra culmen de la época del califato nazarí en Granada es el conjunto de edificios y ambientes de la Alhambra: el pórtico del Partal; el patio y torre de Comares; el patio de los leones; el mirador de Daraxa; etc. Y todo rodeado por los jardines del Generalife, dotando al conjunto de unas vistas y un frescor sólo apreciables en su justo valor por quienes llegaban del difícil clima del norte de África.
En la arquitectura se distinguen tres períodos:
El califal (siglos VIII-XI). El modelo de arte califal es la Aljama o mezquita de Córdoba, única entre todas las mezquitas conocidas, que pone los cimientos de una nueva arquitectura islámica. La parte primitiva de Abderramán I tiene once naves, ampliadas por Abderramán II, Alhaquem II, de cuya nave vemos un detalle del techo, Almanzor hasta diecinueve naves. El interior es un bosque de columnas, casi un millar, cada una con una perspectiva diferente y con capiteles variados.
El almoraví y almohade (siglos XI-XIV). Al arte almoraví y almohade, llamado también africano, cuenta con los restos de la Aljafería de Zaragoza; el Palacio de Yeso del Alcázar de Sevilla; la Giralda, minarete de la mezquita de Sevilla, comenzada en 1173 por Abu Yacub, y otras obras notables.
El nazarita o granadino (siglos XIV y XV). La obra culmen de la época del califato nazarí en Granada es el conjunto de edificios y ambientes de la Alhambra: el pórtico del Partal; el patio y torre de Comares; el patio de los leones; el mirador de Daraxa; etc. Y todo rodeado por los jardines del Generalife, dotando al conjunto de unas vistas y un frescor sólo apreciables en su justo valor por quienes llegaban del difícil clima del norte de África.
ARTES MENORES
La cerámica artística de Paterna, y las vasijas de vidrio, hierro y bronce con dibujos esmaltes, de Almería, tuvieron justa fama, así como las armas de acero templado con artísticas decoraciones e incrustaciones en oro.
Estuche de marfil de la época de Abderramán, conservado en el monasterio de Silos. Cerámica Nazarita.
En la pintura, la prohibición del Corán de representar seres animados sólo parece afectar a las mezquitas, que son los pocos monumentos que nos han quedado intactos. Los animales sólo se reproducen como motivo ornamental. La figura humana apenas se representa, siendo una excepción este retrato de un rey nazarí de Granada, que se encuentra en la bóveda de la sala de Justicia de la Alhambra.
Los cueros estampados (cordobanes) y dorados (guadamecies) tuvieron renombrada celebridad; el papel de hilo y de cáñamo se fabricó por primera vez en Játiva. La carpintería, el mosaico y el trabajo del yeso fueron artes decorativas muy cotizadas. La moneda era de oro (dinar) o de plata (dirhem).
Caja cilíndrica de Zamora. Este bote de marfil fue un joyero labrado en el taller cordobés de marfiles en el año 964 para Sobeya, favorita de Alhaquen II. Está decorado con relieves de atauriques y animales. Las inscripciones en letras estilizadas forman una orla alrededor de la tapadera. Arca árabe de marfil, conservada en la catedral de Pamplona.
Estuche de marfil de la época de Abderramán, conservado en el monasterio de Silos. Cerámica Nazarita.
En la pintura, la prohibición del Corán de representar seres animados sólo parece afectar a las mezquitas, que son los pocos monumentos que nos han quedado intactos. Los animales sólo se reproducen como motivo ornamental. La figura humana apenas se representa, siendo una excepción este retrato de un rey nazarí de Granada, que se encuentra en la bóveda de la sala de Justicia de la Alhambra.
Los cueros estampados (cordobanes) y dorados (guadamecies) tuvieron renombrada celebridad; el papel de hilo y de cáñamo se fabricó por primera vez en Játiva. La carpintería, el mosaico y el trabajo del yeso fueron artes decorativas muy cotizadas. La moneda era de oro (dinar) o de plata (dirhem).
Caja cilíndrica de Zamora. Este bote de marfil fue un joyero labrado en el taller cordobés de marfiles en el año 964 para Sobeya, favorita de Alhaquen II. Está decorado con relieves de atauriques y animales. Las inscripciones en letras estilizadas forman una orla alrededor de la tapadera. Arca árabe de marfil, conservada en la catedral de Pamplona.